Dom Pierre Pérignon: el monje que descubrió las burbujas

A todos nos gusta disfrutar de los buenos vinos, ¡incluidos los espumosos! Y el champagne es protagonista en muchas de nuestras celebraciones. Cuenta la leyenda que esta bebida burbujeante hace su aparición en el siglo XVII, gracias a un monje benedictino llamado Dom Pérignon. Este era responsable de las bodegas de un convento y como persona curiosa que era... le gustaba experimentar, de hecho, también a él se le atribuye el uso del corcho. Un buen día decidió probar el vino todavía en período de fermentación y quedó muy sorprendido cuando al beberlo notó que aquel brebaje le estallaba en el propio paladar, ¡eran las burbujas! Llamó apresuradamente a los demás frailes para que probasen aquel delicioso y extraño caldo. A partir de aquí su método se denominó champenoise y revolucionó el mundo de los vinos, tanto de su época como de los siglos posteriores.

¿Quién fue Dom Pierre Pérignon?

Poco se habla de la vida de Dom Pierre Pérignon, ¡pero sí de sus inventos! Nació en el año 1639 y pasó a la historia por descubrir los vinos espumosos. En 1668 fue nombrado director de la bodega de la Abadía de Hautvillers, donde le gustaba realizar experimentos para mejorar la calidad de sus vinos, mezclando uvas de diferentes cepas para obtener un mejor sabor. Gracias a su dedicación podemos disfrutar de unas de las bebidas más gustosas de todos los tiempos. Se cree que era invidente y que por ello tenía los sentidos muy desarrollados, sobre todo el gusto y el olfato. Las fuentes cuentan que cuando Pérignon sintió las burbujas placenteramente en su garganta gritó: “¡Estoy bebiendo estrellas!” Pero ¡hay más! Porque para evitar que las botellas se rompiesen optó por escoger un vidrio más resistente. Además, las tapó con corcho y les colocó los alambres para amarrarlo bien.

¿En qué consiste el método champenoise?

Es un método tradicional utilizado para obtener vinos espumosos y de calidad. Se comienza con la vendimia, siempre realizada de forma manual para evitar que se rompa la uva. Después se procede a una primera fermentación en la que el azúcar cede paso a los alcoholes. A continuación, tiene lugar la etapa del blend, donde los vinos tranquilos son ensamblados y posteriormente se embotella directamente para la segunda fermentación. ¿Qué sucede en esta segunda fermentación? Aquí es donde se forman las burbujas. Se agregan azúcares y levaduras para activarla y se aplica el removido, es decir, se colocan las botellas al revés y se van girando cada dos días para que las levaduras se vayan depositando en el cuello. Finalmente se procede al degüelle y al dosaje. Y todo este proceso se elaboró a partir del descubrimiento de este monje que descansa entre vides, pues esa fue su voluntad antes de morir.