Este fue uno de los motivos que convencieron a Rosario para adquirir la propiedad en 2007, cuando se inició el trabajo de recuperación de un patrimonio histórico-artístico con gran potencial enológico. La histórica finca, con 30 hectáreas de viñedos de Albariño, está rodeada de bosques y un impresionante jardín romántico, el cual alberga 370 camelias y una variedad de plantas como olivos, viñas, limoneros, cerezos, y magnolios. La finca, parte de la Ruta de las Camelias de Galicia, evoca a la magia de la Toscana, con su arquitectura de piedra, sus 24 fuentes escondidas entre parterres y su exuberante vegetación.

El viñedo corona la parte más alta del terreno. El clima atlántico y los suelos graníticos contribuyen a la producción de vinos de alta calidad, representativos de la Denominación de Origen Rías Baixas, destacando por su equilibrio, frescura y persistencia en boca. La bodega Pazo Pegullal ofrece una experiencia enoturística completa, permitiendo a los visitantes explorar la finca, conocer la historia del pazo y disfrutar de catas de sus exclusivos vinos albariños en un entorno natural y culturalmente rico.